top of page

Técnicas de poda más usuales de las plantas de marihuana

Cada variedad de marihuana expresa su personalidad de forma diferente y, por ello, es importante seleccionar la técnica de poda más adecuada a cada caso.

Estas técnicas permiten controlar el crecimiento, mejorar el rendimiento u organizar el cultivo de forma homogénea cuando cultivamos diferentes variedades en un mismo espacio.



¿Por qué y cómo se podan las plantas de marihuana?


Esta pregunta es muy común entre los cannabicultores, en particular cuando queremos controlar el crecimiento de una variedad de marihuana concreta o cuando queremos maximizar el rendimiento de nuestra semilla favorita en un espacio reducido. También es una práctica habitual para conseguir cultivos uniformes cuando cultivamos semillas de marihuana de variedades diferentes. En función de las genéticas cultivadas y del objetivo del cultivador, se seleccionará la técnica de poda más adecuada.


Cada una de las técnicas existentes encaja con un tipo de genética, por ello, a la hora de elegir la variedad o variedades de marihuana que vamos a cultivar, no solo debemos fijarnos en nuestros gustos, sino también en las dimensiones reales del espacio de cultivo. Estas técnicas se aplican indistintamente en los cultivos de interior y de exterior, pero hay que tener en cuenta que en exterior la seguridad y la discreción del cultivo juegan un papel muy importante. A continuación te mostramos cómo aplicar las diferentes técnicas de poda: poda de las partes bajas, poda apical, poda FIM y la técnica super cropping.



La aplicación de estas técnicas ofrece buenos resultados en las variedades feminizadas y regulares, pero no en las autoflorecientes. En las variedades autoflorecientes los resultados se materializan en muy pocos casos, como consecuencia de un ciclo de vida muy corto que no deja tiempo para su regeneración. Cuando plantamos semillas feminizadas o regulares en época tardía tampoco se recomienda el uso de estas técnicas ya que la estructura vegetativa de las plantas no alcanzará el desarrollo requerido.


Poda de las ramificaciones inferiores de la planta de marihuana


La poda de las ramas bajas es una de las técnicas más utilizada en el cultivo de marihuana. Se trata de un procedimiento que permite canalizar el potencial energético de la planta hacia la parte superior y maximizar así los rendimientos de cada una de las plantas. Con este método se optimiza la producción de forma uniforme y se evita la formación dispersa y heterogénea de flores, lo que suele suceder debido a la poca luz que llega hasta la parte baja de la planta.




Poda apical de la planta de marihuana


La poda apical es otra de las técnicas más conocida entre los cannabicultores, se puede aplicar con buenos resultados en interior y en exterior, y con ella se controla el tamaño de la planta de forma muy eficaz. Se trata de una técnica que permite gestionar adecuadamente el espacio de cultivo en interior y en exterior, y con la que se pueden mantener los cultivos de forma discreta en exterior. La técnica consiste en podar el pequeño pico de la parte superior de la planta con la ayuda de unas pequeñas tijeras o de un cúter. Es imprescindible desinfectar previamente la herramienta utilizada en la poda para que esté bien limpia, en caso contrario podrían aparecer síntomas de estrés o incluso patógenos.


Es fundamental aplicar esta técnica con sentido común, siempre en base al crecimiento de la planta, y cuando ésta esté bien formada y disponga del tiempo necesario para repartir la energía por la zona de la planta deseada. Es conveniente realizar este tipo de poda unos 5 ó 10 días antes del cambio al fotoperiodo adaptado a la floración, antes de que se inicie la fase de estiramiento. En este plazo las plantas tienen el tiempo necesario para que se produzcan los cambios estructurales que se han querido provocar con esta técnica.


Al aplicar esta técnica de poda, la producción queda repartida de forma homogénea en las ramas secundarias. Se trata de un método utilizado también por muchos cannabicultores para la conservación de plantas madre. Con esta técnica las auxinas de la planta se distribuyen por las ramificaciones secundarias, lo que favorece considerablemente el crecimiento y el incremento de la producción.